junio 29, 2020

Ironías de la Vida

Por Consultorio de Psicoterapia

Se ha notado últimamente mucha ironía dentro de los trastornos. Aparentemente, para evitar la sensación de ansiedad o depresión tendemos a comportarnos de maneras que según nosotros disminuyen temporalmente la sensación de malestar, aunque por hacerlo, éstas se exacerban en el largo plazo.

La más notable es la fobia social. Las personas que temen a situaciones sociales se preocupan demasiado si son torpes, rechazados o quedarse solos. Por lo tanto, se retiran situaciones sociales con el fin de evitar la preocupación que surge de la potencial aparición del rechazo a tal situación. Sin embargo, al hacerlo, terminan solos, además, aumentan sus posibilidades de ser torpes, ya que evitan la oportunidad de practicar “siendo sociales”.

Otra ironía proviene de ciertos  tipos de depresión. Se ha  visto una y otra vez que  las personas que se sienten deprimidas no llevan a cabo actividades potencialmente gratificantes porque se «sienten demasiado deprimidas.» El ejercicio constante ha demostrado tener efectos significativamente positivos sobre la salud mental; sin embargo sucede constantemente que no se ejercitan porque se sienten deprimidos. Del mismo modo sucede que no comen sanamente porque están disgustados, por lo tanto se sienten  deprimidos por no estar saludables.

Por último, ¿cuántas veces le  has gritado a alguien que amas cuando estás enojado, molesto o no eres feliz? ¿Crees que gritando te va a ayudar  a sentirte más feliz? Esto es una locura, pero todos hemos estado enojados con otros por no pensar como creemos que deberían; sin embargo, no se ha  visto que esto contribuya realmente a crear un ambiente positivo.

Parece importante saber cómo estos comportamientos irónicos en los que nos involucramos nos llegan a lastimar. Los creamos para evitar la angustia emocional, sin embargo provocamos un mayor costo emocional, perdiendo de vista nuestros valores reales. Observa las ironías de tu vida para que te ayuden  a motivarte y  puedas parar ese ciclo contraproducente.